Inauguraron una “casa comunitaria convivencial” para mujeres y disidencias
Con el impulso del Movimiento de Trabajadores Excluidos, se trata de un espacio para afrontar consumos problemáticos acompañadas por profesionales y con salidas laborales.
Una “casa comunitaria convivencial” para la asistencia de mujeres y disidencias que atraviesan consumos problemáticos fue inaugurada en Mar del Plata por el espacio Vientos de Libertad que forma parte del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE). “Esta casa brindará atención y acompañamiento gratuito a quienes decidan realizar un proceso de transformación incluso con sus niñeces, desde una mirada integral y comunitaria con perspectiva de género”, señalaron.
El movimiento social con representación a lo largo del país, además de organizar a trabajadoras y trabajadores excluidos y de la economía popular, empezó a impulsar hace 20 años diversas acciones sociales como la generación de dispositivos para asistir a poblaciones vulnerables y atravesadas por adicciones. En Mar del Plata ese trabajo lo realiza hace cuatro años la rama “Vientos de Libertad” dentro del MTE, con sede en el barrio Pueyrredon y también desde hace poco más de un año en el Complejo Centenario.
Ahora, la organización dio un nuevo paso en el marco de ese trabajo territorial y abrió una “casa comunitaria convivencial”, ubicada en la zona del barrio La Perla.
“Es un espacio donde mujeres y disidencias podrán afrontar sus consumos problemáticos acompañadas por profesionales, compañeras y con salidas laborales. Ante la falta de políticas municipales que trabajen esta temática, cuando es algo que afecta mucho en nuestros barrios populares, son las organizaciones sociales las que traemos las soluciones”, expusieron desde Vientos de Libertad y sumaron que el lugar “brindará atención y acompañamiento gratuito a quienes decidan realizar un proceso de transformación incluso con sus niñeces, desde una mirada integral y comunitaria con perspectiva de género”.
En el marco del trabajo barrial que realiza, la organización entendía la necesidad de contar con un espacio de estas características para reforzar la asistencia a poblaciones vulnerables.
“Va a ser la primera casa que aloje a mujeres y disidencias con la problemática de consumo, que puedan hacer un tratamiento y que puedan acceder a ese tratamiento con sus niñeces. Es muy importante para nosotros porque venimos trabajando hace cuatro años en Mar del Plata y veíamos que no existen lugares que alojen a estas compañeras“, concluyeron.
