Proponen que si la SUBE falla o se rompe se pueda viajar igual
Pese a la existencia de una resolución de la CNRT, el concejal Balut Tarifa Arenas presentó un proyecto ante las quejas por fallas del sistema, el desgaste y la rotura de los plásticos. “El usuario carece de alternativas protectorias”, dijo.
Si bien una resolución (Nº 811/2011) de la Comisión Nacional de Regulación de Transporte (CNRT) ya establece que los usuarios del servicio público de pasajeros que experimenten problemas con el medio de pago podrán viajar gratis, en el caso de la tarjeta SUBE existe una “desprotección” de los pasajeros que a través de un proyecto presentado por el concejal Balut Tarifa Arenas busca revertirse.
El proyecto de comunicación que elevó este lunes apunta a que el Ejecutivo autorice que ante el incorrecto funcionamiento de la tarjeta SUBE al momento de abonar el boleto (no por falta de saldo o exceso del saldo negativo), el usuario pueda igualmente viajar -junto con aquellos menores que eventualmente estén a su cargo- contra entrega de la tarjeta al chofer, quien la retendrá expidiendo un comprobante con los datos necesarios para que su titular pueda hacerse de una nueva tarjeta SUBE.
La iniciativa contempla también que en el caso de que el usuario no quiera dejar retenida su tarjeta SUBE, ante el mal funcionamiento de la misma, solo podrá ser bajado de la unidad en las proximidades de un punto de carga, que esté en funcionamiento y atendiendo al público, ubicado en zona urbana a no más de tres cuadras del punto del descenso.
A pesar de la existencia de la mencionada resolución de la CNRT, en el caso de que la tarjeta SUBE del usuario sea la que no funcione o lo haga indebidamente, “éste no tiene protección alguna y debe abandonar la unidad en el punto en donde se encuentre”, por lo que “nos encontramos ante una situación en donde el usuario carece de alternativas protectorias que garanticen su bienestar”, advirtió el autor del proyecto.
Tarifa Arenas propuso que ante la rotura de la tarjeta o el defectuoso funcionamiento, se posibilite realizar el viaje contra entrega del plástico al chofer -con el objetivo de que no pueda volver a ser usado en otra oportunidad-, quien “le dará al usuario un comprobante a los efectos de que este lo presente al momento de adquirir la nueva tarjeta, respetando el saldo existente al momento de la falla”.
Ese comprobante deberá registrar todos los datos que sean necesarios para obtener una nueva tarjeta SUBE.
Con respecto al segundo artículo del proyecto, aquel que propone que el pasajero pueda ser bajado de la unidad en las proximidades de un punto de carga en zona urbana a no más de tres cuadras del punto del descenso, Tarifa Arenas remarcó que así “se evitaría que los vecinos sean bajados del colectivo en lugares alejados o aislados, y se facilita el proceso de adquisición de una nueva tarjeta SUBE, esta vez abonando el precio que se encuentre estipulado”.
