Se encadenó en la Municipalidad por la salud de su mujer
Una mujer sufrió hace diez meses un accidente el bajar de una unidad de la línea 521 que le causó una triple fractura. Su esposo inició acciones legales contra la empresa 25 de Mayo y afirmó que “necesita operarse con urgencia”.
En el Día de la Mujer, bajo un sol agobiante Horacio Alberto Martín decidió encadenarse este domingo en el acceso por la avenida Luro a la Municipalidad de General Pueyrrredon a la espera de un encuentro con el secretario de Desarrollo Social, Martín Aiello. Denuncia que su mujer, quien sufrió un accidente hace varios meses al bajar del colectivo, fue víctima de una mala praxis y necesita operarse con urgencia.
Hace aproximadamente diez meses, Silvia Amalia Mansilla, de 48 años y vecina del barrio Alto Camet, viajaba en una unidad de la línea 521. Al bajar del colectivo, en Alvarado y Tucumán, el chofer habría retomado la marcha antes de que la mujer descendiera y entonces sufrió una caída que le provocó una triple fractura. Allí, comenzó el problema que aún no encontró solución.
Horacio, su esposo, la llevó a la Clínica de Fracturas, donde “le dijeron que tenía un esguince severo”. Meses más tarde, una resonancia magnética mostró que en realidad se trataba de una triple fractura. Pero luego, el hombre dice que le quitaron la prestación y desde entonces “en ningún lugar la pudieron operar, pero hace diez meses que mi mujer está llorando y tiene el pie como una morcilla. Y eso es mala praxis”, denunció.
Por este hecho, Horacio inició una acción judicial contra la empresa 25 de Mayo, la Clínica de Fracturas, la aseguradora y también contra el chofer. “En la empresa no se hicieron cargo le dijeron a mi abogado que no la iban a cubrir”, afirmó.
Este domingo, tras un nuevo intento frustrado en el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA) para lograr que su mujer sea operada, decidió encadenarse en la puerta de la Municipalidad. Cerca del mediodía, ató una cadena a su torso desnudo y decidió aguardar bajo el sol hasta que lo recibiese el secretario de Desarrollo Social.
Efectivos policiales de la comisaría primera se acercaron pasadas las 17.30 a Luro e Hipólito Yrigoyen para asistir a Horacio Alberto Martín. “Yo quiero ver a Martín Aiello y que me brinde una solución, porque mi mujer no puede seguir sufriendo así. Que alguien nos escuche por Dios”, exclamó a viva voz para captar la atención de quienes pasaban por el lugar.
El obstáculo que hoy encuentra Horacio para lograr que su mujer pueda ser operada, es fundamentalmente económico. “No nos cubren la operación y yo no tengo el dinero para operar a mi esposa. Soy pensionado, gano $2197 de bolsillo. No puedo pagarle la operación. Perdí todos los ahorros porque los puse todos sobre mi mujer. No quiero que mi esposa pierda un pie”, le contó a QUÉ.
En el Día de la Mujer, Horacio llegó al límite de decidir encadenarse para pedir justicia precisamente por su mujer. “Yo soy apolítico, no me importa el dinero, solo quiero que mi señora esté bien, que se pueda operar. No sé a quién más recurrir. Amo a mi mujer y estamos desesperados por su salud”, completó.
