Arroyo pidió perdón: “Estos cuatro meses me parecen siglos”
El intendente encabezó la apertura de sesiones ordinarias del Concejo Deliberante. Dijo que se enfrenta a “enormes dificultades”, pero afirmó que tiene un “proyecto intacto” y que “se cumplirán todas las promesas de campaña”.
Concretadas seis salidas dentro del gabinete en menos de cuatro meses, la palabra del intendente era la más esperada. No solo por el contexto -la sesión pública preparatoria que dio inicio al período de sesiones ordinarias en el Concejo Deliberante- sino por la innegable crisis política que atraviesa la gestión. Y en ese sentido, Carlos Arroyo le habló a los marplatenses. “Estos cuatro meses me parecen cuatro siglos”, admitió, aunque también aseguró tener un “proyecto intacto” y se comprometió a cumplir “todas las promesas de campaña”.
En un discurso que duró poco más de quince minutos, Arroyo hizo una especie de balance de sus primeros meses de gestión y no pudo evitar hacer referencia a los conflictos que atraviesa el gobierno, en especial a raíz de los reclamos de diferentes sectores. Sin ir más lejos, en paralelo al acto en el recinto de sesiones, trabajadores de cultura llevaban adelante un festival para pedir soluciones ante los salarios adeudados.
Y en esa misma línea, intendente salió al cruce de quienes lo acusan de culpar de todo a la herencia del gobierno anterior. “No pienso hacer ni hablar de la historia, sino que me voy a referir a lo que vamos a hacer”, advirtió y se sinceró: “Todos son conscientes de que hay una enorme cantidad de dificultades, casi todas con un común denominador de tipo económico. Y eso es porque hay una gran parte del pueblo que -con legítimo derecho- quiere cobrar por trabajos realizados y nosotros por motivos ‘x’ no podemos satisfacerlos”.
Sobre sus primeros meses de gestión, el jefe comunal se refirió a la situación: “Estos cuatro meses me parecen cuatro siglos porque han sido muy largos, muy difíciles por tener que afrontar una gran cantidad de situaciones como consecuencia de desaciertos anteriores”. Sin embargo, Arroyo dijo querer llevarle tranquilidad a los vecinos al subrayar: “Tenemos un proyecto intacto, lo digo porque escuché algunos comentarios respecto al hospital municipal, por ejemplo, y lo cierto es que el hospital municipal se va a hacer, pero primero tengo que pagar todo lo que otros no pagaron”.
A su vez, el intendente defendió y respaldó a su secretario de Economía y Hacienda, José Cano, quien no estuvo presente en el acto. En concreto, dijo que “por ser quien tiene que pagar es bastante criticado”, pero que ha logrado pagar una deuda de $241 millones en tres meses. “La hombría de bien hace que tengamos que cubrir los desaciertos, cumplir con la palabra del intendente porque hoy institucionalmente somos responsables”, consignó, aunque llamativamente ese concepto pareciera distar de la postura de Cano, quien días atrás se cruzó con los artistas cuando acusó al exintendente, Gustavo Pulti, de ser el responsable de las deudas.
DESPRESTIGIO, ELENCO Y UN LLAMADO A LA OPOSICIÓN
Por otro lado, Arroyo volvió a cuestionar la denominada “campaña de desprestigio” en su contra y aunque no habló de nadie en particular, todos los caminos llevan al multimedios La Capital y a su responsable, el empresario Florencio Aldrey Iglesias. Sin embargo, dejando de lado las críticas, el intendente se mostró optimista: “No tengo ninguna duda de que vamos a tener la mejor gestión de los últimos 40 años. Hoy las expectativas están intactas y todo lo que se prometió en campaña se va a cumplir”.
Durante su discurso, el jefe comunal se refirió a su gabinete y dijo estar acompañado de “un elenco de grandes, que va a mejorar todavía más en muy poco tiempo”. “El proyecto que trajimos al gobierno es un proyecto amplio, de ninguna manera pensé en limitarlo a Cambiemos. Necesito y quiero la participación de todas las fuerzas políticas, porque todos somos responsables de la ciudad y sus habitantes”, sumó en un llamado al diálogo con la oposición.
Antes de terminar, Arroyo le pidió perdón a los marplatenses si en algo se equivocó y apeló a la religión al afirmar: “Soy humano, nunca me creí un Dios y es todo lo que les puedo decir”. Y en cuanto a algunas de sus polémicas decisiones, defendió la falta de designación de un secretario de Seguridad, área que quedó acéfala allá por diciembre.
“Yo asumí ese riesgo y creo que los hombres de bien deben afrontar los riesgos. Porque con eso hemos ahorrado miles de pesos al sumir yo ese rol. Y hemos tenido 11 muertos menos que en el mismo período del año pasado. Por ese solo hecho puedo decir que la gestión ya es exitosa”, sostuvo y llamó “a todos los marplatenses de bien” a trabajar.
APUNTES SOBRE LA REPRESIÓN
Uno de los tramos de la alocución del jefe comunal estuvo enfocado en la cantidad de manifestaciones y protestas registradas en los últimos meses. En concreto, Arroyo consideró que las mismas disminuyeron en frecuencia, pero crecieron en intensidad. Sin embargo, valoró “no haya quema de gomas”, se refirió a los reclamos en sí e hizo una particular apreciación sobre la represión.
“Esos habitantes que nos pusieron aquí, los que se quejan en la calle, son el pueblo que está lastimado. Y tienen razón, porque cada vez que ha habido un desorden he descubierto que siempre tenían razón los que reclamaban. Y entre otras cosas, por eso nunca hubo represión, porque no podemos reprimir al justo, al que reclama lo suyo”, sostuvo.
