Jorge Altamira: “La inmensa pobreza coincide con la decadencia política”
El referente del Partido Obrero pasó por Mar del Plata y analizó las elecciones que se vienen. El armado del Frente de Izquierda, los acuerdos electorales, Mar del Plata y Arroyo y el feminismo, algunos de los temas abordados.
| Por Juan Bronzini
A 50 años del Cordobazo, el referente del Partido Obrero Jorge Altamira llegó a la ciudad para dar una charla al respecto de ese hecho histórico en la Universidad Nacional de Mar del Plata. Pero en la previa se tomó un tiempo para hablar con QUÉ Digital y contar sus pareceres sobre las elecciones que se vienen.
Cinco veces candidato a presidente de la Nación y una vida en la militancia lo respaldan para dialogar sobre las decisiones del Frente de Izquierda, los acuerdos políticos para las elecciones, el feminismo, la figura de Alejandro Martínez (precandidato a intendente del Frente de Izquierda) y la situación de ciudades como Mar del Plata y el intendente Carlos Arroyo, sobre lo cual define: “Se nota la inmensa pobreza que hay en la periferia de la ciudad que coincide con la decadencia política”.
– ¿Cómo ve el armado del Frente de Izquierda para las elecciones que se vienen?
– En la visión nuestra, en algunos distritos por un pequeño porcentaje el Frente de Izquierda quedó en la puerta de tener las bancas en Diputados en elecciones anteriores, por ejemplo en la Ciudad de Buenos Aires quedamos en la puerta y si Luis Zamora iba por dentro, esas bancas se hubiesen conseguido. Esta no es una mirada electoralista, nosotros abrimos la discusión para conseguir más votos para que la representación de la izquierda llegue a las cámaras.
Para algunos habría que conseguir un partido único, que era una forma un poco veloz y desprolija porque uno no puede armar un partido sin acuerdos programáticos sólidos. Por eso con el Nuevo MAS y con Luis Zamora no hubo acuerdo, cosa que sí pasó con el MST (Movimiento Socialista de los Trabajadores). Lamentablemente los acuerdos llegaron tarde como por ejemplo en Santa Fe que el FIT fue debilitado y no pasó el piso de las PASO (Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias).
– ¿Y por qué el acuerdo no se hizo antes?
– Un proceso electoral no puede ir separado de una estrategia política. Por ejemplo el MST apoyó a la Sociedad Rural en el conflicto de la 125 y en Córdoba hizo un frente electoral con Luis Juez. Uno piensa ¿qué acuerdo puedo hacer con ellos? Pero lo importante es saber que más que la amplitud del frente, lo que gana votos es la credibilidad de lo que hay. Si el frente es amplio pero no genera seguridad, no sirve de nada.
Si yo me concentro solo en los procesos electorales, yo puedo tener diez diputados, pero estaremos más lejos del socialismo que nunca.
– ¿Los acuerdos de los grandes partidos son meramente electoralistas?
– Hay que respetar más a la derecha en este aspecto. Porque detrás de estos acuerdos hay alianzas importantes. Si uno lo mira como partido rival, algo hay de cierto, pero si analizamos ni Alberto Fernández ni Miguel Pichetto aportan ningún voto a sus coaliciones. Pero desde el punto de vista de las indicaciones que le dan a los grandes grupos económicos que tienen que por un lado solventar financieramente a sus partidos y después dar gobernabilidad, te das cuenta que hay una estrategia.
En la medida de que sirva para sortear escollos electorales está bien abrir la discusión, siempre y cuando ese acuerdo no vulnere de ninguna manera la libertad política de los partidos para mantener su perspectiva revolucionaria y no dejarse atrapar por acuerdos como los de Pino Solanas, Luis Juez o la Sociedad Rural.
La Izquierda Socialista también apoyó a la Sociedad Rural, aunque en menor medida. Las divergencias están como por ejemplo en las miradas con respecto al ámbito internacional donde ellos tienden a apoyar a la derecha y para un revolucionario la cuestión internacional es importante porque un avance de la derecha afuera es muy difícil que de un buen resultado para el socialismo local. Lo importante es que el Partido Obrero mantiene su perspectiva y reconoce sus límites.
– ¿Por qué cuando consiguen bancas no se arma el bloque del Frente de Izquierda?
– Tranquilamente podría existir, nosotros creemos que debe pasar. Pero cuando hay un bloque único de distintas fuerzas, tiene que haber un régimen para que cada uno entienda su lugar. Por ejemplo, presidente de bloque hay uno, ni dos ni tres, y eso se tiene que acordar previamente.
Lo importante es que si hay partidos que quedan afuera de las bancas, esos partidos deben seguir dentro como asesores y acompañando en las luchas.
– ¿Cómo se hace para ganar votos y bancas sin el apoyo de los grandes medios?
– Los medios deben trabajar en una realidad contradictoria. No son tan omnipotentes como uno piensa. Son un monopolio, pero no hay que ser tontos como para no darnos cuentas que los medios no están por encima de la sociedad. En distintas oportunidades ellos ventilan datos y análisis que suman a la crisis y no la neutralizan. Hay artículos en Clarín en donde vos te das cuenta que atrás hay una pelea. Por ejemplo, entre Macri y Clarín hay una divergencia del círculo rojo porque él no quería que eso lo dominara. Y Clarín, que pertenece al círculo rojo, el día del ballotage llama a votar al peronismo y después durante cuatro años hace una campaña para sumar peronistas al gobierno. No hay ninguna forma de dominación que pueda resolver la tendencia profunda de un pueblo en situaciones de grandes crisis a intervenir y querer resolver las cosas por su propio bien.
– Al pasar por Mar del Plata, ¿cómo nota su realidad?
– Durante muchos años aquí gobernó el socialismo y fue una época de prosperidad para los trabajadores. Después eso cambió por la decadencia de la ciudad. Y Arroyo es un cooptado como casi todo el PRO. En el momento actual se nota la inmensa pobreza que hay en la periferia de la ciudad que coincide con la decadencia política.
– ¿Qué piensa del precandidato a intendente, Alejandro Martínez?
– Él ha sido el portavoz del partido en la ciudad y a nivel nacional lo consideramos una buena figura porque más allá de ser la voz en los procesos electorales, se mide su liderazgo en las luchas de los trabajadores. Y Alejandro se destaca como líder.
El único partido de izquierda que pone sus líderes al frente es el PO. Si vos mostrás el liderazgo en las luchas y en la calle, sos el candidato nuestro. En los demás partidos no sucede. Muchos deciden por su función mediática y eso significa que el liderazgo queda atrás y cuando haya luchas claves, esos partidos van a apostar a figuras mediáticas y no a sus líderes.
– ¿Cree que el feminismo puede ser fundamental en la elección que se viene?
– Si el feminismo llegara a ser fundamental en una elección será por un hecho excepcional. Los destinos de un país se definen en las acciones de conjunto. Porque una feminista elige un partido antifeminista porque tiene intereses capitalistas y está con el FMI y no vota a un partido feminista como el FIT por sus ideas socialistas. Entonces ellos buscan un partido que le responda en todos sus intereses. Y los partidos de derecha ponen feministas en sus listas para tirar un anzuelo.
Es importante que ellas entiendan que si ellas no incorporan las contradicciones de clases no va a poder desarrollar un movimiento consistente. Ellas van a triunfar cuando formen un poderoso movimiento socialista entre las mujeres y demostrar que solo cuando se identifique con el socialismo es capaz de formar una masa crítica eficaz a la hora de tomar decisiones dejando de lado las ambigüedades. La sociedad tiene incorporada la lucha de la mujer en bases contradictorias porque no va a votar contra sus intereses de clase por encima a sus derechos de mujer. La izquierda debe convocar a la mujer para dar una base coherente para que su movimiento crezca ante la decadencia del capitalismo.
