Zona norte: piden informes para analizar la incorporación de barrios al ejido urbano
Desde hace años es un pedido de vecinos y vecinas de la zona ante un crecimiento poblacional que, aseguran, se da a un ritmo superior al resto de la ciudad.
Con el objetivo de sumar barrios ubicados al norte del arroyo La Tapera a la actual delimitación del “ejido urbano” de la ciudad de Mar del Plata, desde la oposición piden informes para que el Municipio dé precisiones sobre la factibilidad, las acciones necesarias y los criterios que se utilizan para establecer los límites en sus actuales bordes. Afirman que su inclusión “redundaría en beneficios” para la zona costera norte.
Desde hace años, desde la Defensoría del Pueblo impulsan junto a vecinos de barrios como Jardín de Alto Camet, Las Dalias, Parque Camet, Parque Peña y Félix U. Camet pedidos para garantizar un “crecimiento estratégico” de la zona, por ejemplo, a través de su incorporación al denominado “ejido urbano”, que actualmente está delimitado por la costa como límite este, el arroyo La Tapera como límite norte, la avenida Errea, avenida Juan B. Justo, Avenida Tetamanti como límites del oeste, y la avenida Mario Bravo hacia el límite sur, aproximadamente.
Dos años después de la presentación de un documento titulado “El norte costero necesita respuestas”, firmado por más de 40 entidades barriales, desde la oposición se hicieron eco de uno de los principales pedidos de los vecinos de la zona que tiene que ver con la incorporación de los barrios de la zona costera norte al ejido urbano.
Puntualmente, un proyecto de comunicación en este sentido fue presentado en los últimos días por parte del bloque de Unión por la Patria y solicita al gobierno un informe sobre la “factibilidad, criterios actuales y acciones necesarias” para la extensión del ejido urbano del partido hacia los barrios Jardín de Alto Camet, Las Dalias, Parque Peña y Félix U. Camet.
Entre los argumentos, el concejal Miguel Guglielmotti plantea que por su ubicación, el sector norte posee la cualidad de acceso a la ciudad y también representa “un área que actúa como mediador entre la costa marítima y las zonas que limitan con la Ruta 2”.
Desde Unión por la Patria, además, advierten que la última actualización del ejido urbano -según datos del Plan Estratégico 2004- se realizó en 1963: la incorporación de barrios al mismo podría “redundar en beneficios” ya que es una variable que se utiliza para la planificación de políticas y garantizar un crecimiento ordenado.
Asimismo, el bloque se hizo eco de un trabajo colaborativo entre el Instituto de Investigaciones sobre Sociedades, Territorios y Culturas (ISTeC) y el Instituto del Hábitat y del Ambiente (IHAM) dependientes de la Universidad Nacional de Mar del Plata, a través del cual investigadores del Conicet señalaron que en diez años la zona creció un 91%, cinco veces más que el ritmo de desarrollo del resto de la ciudad.
Específicamente, citó que mientras en 2010 se contabilizaban -según el Indec- 4.376 viviendas, ese número en 2020 pasó a ser de 8.358, con todo lo que implica ese incremento poblacional para las condiciones de hábitat de la zona.
Pero además de esas necesidades, desde la Defensoría impulsaron tiempo atrás un pedido por una “compensación ambiental” del norte del arroyo La Tapera, ante las consecuencias que sufrió el sector por la contaminación derivada del desagote de efluentes cloacales de la planta de Obras Sanitarias que funcionó en Parque Peña que, de alguna manera, a partir de 2014 con la instalación del Emisario Submarino “comenzó a revertirse”.
