Déficit habitacional: una nueva toma de terrenos en el barrio Las Heras
En los últimos días distintas familias empezaron a instalarse en tierras de la avenida Fortunato de la Plaza y Tetamanti.
A poco más de cuatro meses de la desocupación de otro terreno y sin mayores respuestas habitacionales brindadas a las personas afectadas, una nueva toma de terrenos se inició en el barrio Las Heras de Mar del Plata. Desde el domingo distintas familias comenzaron a acercarse para montar precarias casillas ante una realidad en común y repetida: la imposibilidad de acceder a un alquiler y la falta de herramientas desde el Estado que permitan el acceso a una vivienda digna.
La toma sobre la avenida Fortunato de la Plaza y Tetamanti -a unas diez cuadras de la anterior- se inició el domingo y con el correr de los días se fue ampliando. Este jueves había decenas de familias que se instalaron en los terrenos, comenzaron a delinearlos, instalaron algunas carpas y otras ya empezaron a levantar casillas.
Familias sin trabajo o con empleo precarizado con el que no pueden llegar a solventar los costos de los alquileres constituyen el motivo central que volvió a impulsar la nueva toma de terrenos que, según confirmaron desde el gobierno municipal, en este caso pertenecen a un privado que por estas horas intenta ser identificado.
Este jueves durante un tramo de la mañana en el lugar se observó la presencia de la Policía y de la Secretaría de Desarrollo Social de la Municipalidad. Según explicaron fuentes municipales, este miércoles a la mañana un vecino de la zona avisó a las autoridades sobre la presencia de personas en el terreno y en ese momento desde el gobierno se dio intervención a la Fiscalía N°12 temática de usurpaciones, a cargo de Juan Pablo Lódola.
Hacia la noche de este miércoles se había contabilizado la presencia de unas 50 personas en el terreno. Entre ellas este jueves había un grupo que formó parte de la anterior ocupación en Las Heras, en un terreno municipal.
Fue entre fines de octubre y principios de noviembre cuando se cumplieron doce días de toma el terreno municipal de Fortunato de la Plaza y Rufino Inda en los que llegó a haber 55 grupos familias reclamando en simultáneo. En el medio, hubo una denuncia penal del gobierno municipal, una orden de desalojo habilitada por la Justicia y una desocupación “voluntaria” frente a un impresionante despliegue policial.
Después, llegó una asistencia temporal alimentaria y un puñado de las familias permaneció algunos días en paradores o instituciones municipales hasta poder acceder a un “subsidio habitacional” que, de todas maneras, les fue insuficiente para hacer frente a los valores del mercado. Hoy algunas de esas familias vuelven a formar parte de la nueva toma.
