EMAD, la escuela que espera respuestas hace 39 años
La Escuela Municipal de Arte Dramático fue creada en 1979 y desde ese momento busca tener un edificio propio. Los reclamos volvieron a impulsarse, y en el Concejo piden informes por el estado del actual edificio.
En medio de los crecientes reclamos por el estado de las escuelas, uno de los pedidos que volvió a tomar impulso es el de la Escuela Municipal de Arte Dramático (EMAD), institución que fue creada hace 39 años pero que, sin embargo, nunca tuvo un edificio propio, con las dificultades que ello conlleva. Pese a anuncios realizados años atrás, las promesas nunca se cumplieron y los alumnos siguen cursando en lugares inadecuados. Esta semana volvieron a sacar su reclamo a la calle y en paralelo en el Concejo Deliberante ingresó un pedido de informes sobre el estado en que se encuentra el actual edificio central en el que se dictan las clases.
La EMAD fue creada hace 39 años, en 1979, y desde ese momento las clases se dictan en diferentes espacios, la mayoría sin la preparación necesaria para el tipo de actividades que realizan. Actualmente los alumnos concurren a un edificio provisorio de Necochea 3672 y muchas de las clases funcionan en edificios anexos.
Mientras siguen a la espera de que el gobierno municipal durante alguna gestión se digne a escuchar los reclamos y a construir un edificio propio, la comunidad educativa sacó esta semana los reclamos a la calle, con clases públicas e intervenciones, en el marco de los crecientes reclamos educativos y de la toma estudiantil que se mantiene en el Consejo Escolar por el estado de las escuelas. “Nuestra escuela se suma a la larga lista de aquellas afectadas por el abandono del Estado. Alzamos nuestra bandera en una lucha ya histórica por un edificio propio y condiciones dignas del actual“, plantearon los estudiantes.
Según explicaron, la escuela comparte actualmente su sede con el Instituto Almafuerte, en un edificio privado alquilado por el Municipio. “Frente a nuestra currícula que no para de crecer, nos encontramos con que nuestra estructura organizativa no puede acompañar la realidad de nuestras pequeñas aulas. Llevamos varios pedidos por la apertura de nuevas horas que nos permitan alivianar el trabajo de nuestros profesores, que trabajan muchas veces en aulas colapsadas, con enormes grupos de diferentes carreras en un mismo espacio, que a su vez no es apto para nuestra actividad”, puntualizaron.
En este contexto, el concejal Ariel Ciano ingresó al Concejo un proyecto de comunicación en el que busca que el gobierno municipal de respuestas por el estado en que se encuentra el actual edificio. “Entre los reclamos que los alumnos expresan, se encuentra la existencia de goteras, que la escuela no tiene salida de emergencia, que no se realizan desinfecciones y que como consecuencia, hay alumnos que tienen alergia por picaduras de pulgas”, plantea el pedido de informes.
Asimismo, remarca que “debido a la pequeñez del edificio de la calle Necochea, muchas de las clases funcionan en edificios anexos, en una suerte de descentralización que poco favorece a la comunicación de esa comunidad educativa” y señala que la situación “lleva a los alumnos a pensar con absoluta lógica que hay un estado de abandono y que el municipio no atiende los reclamos.”
ANUNCIOS QUE NUNCA SE CUMPLIERON
Un anuncio oficial respecto a la construcción del edificio propio que el exintendente Gustavo Pulti realizó en el 2013 -en medio de la campaña electoral- había llegado luego de un intenso reclamo de la comunidad educativa por una ordenanza que nunca se cumplió: en marzo de 2011 el Concejo Deliberante aprobó la creación de un paseo público denominado “Corredor de las Artes” que estaría comprendido entre el Instituto Saturnino Unzué y el Museo de Arte Contemporáneo y allí se instalaría el nuevo edificio de la escuela.
Finalmente, fue el 18 de octubre de 2013 cuando el Concejo Deliberante aprobó por unanimidad la iniciativa del Ejecutivo que autorizó la cesión de un terreno lindero a la Vieja Usina del Puerto con el fin de construir una sede para la institución. Luego, en junio de 2015 y ante una serie de reclamos, el gobierno anunció que al mes siguiente llamaría a licitación para la construcción del edificio e incluso dio precisiones respecto a la obra. Pero eso nunca ocurrió. Hasta ahora, la gestión de Carlos Arroyo tampoco ha dado respuestas ni señales de avance en este sentido.
