Giorno: la empresa endureció su postura y ofreció retiros voluntarios
La firma multinacional ofreció indemnizaciones del 70% para quienes no acepten las nuevas condiciones de trabajo impuestas.
Trabajadores del frigorífico Giorno mantuvieron en las últimas horas una audiencia ante el Ministerio de Trabajo con las autoridades de la empresa multinacional en la búsqueda por llegar a un acuerdo ante el descontento por los cambios en las condiciones de trabajo y la reducción de sus ingresos. Sin acuerdo, la empresa ratificó su postura y ofreció retiros voluntarios para quienes no estén de acuerdo con las tareas asignadas.
Semanas atrás se había retomado el conflicto en el frigorífico ubicado en Ayolas al 3000, con protestas en las inmediaciones -acompañadas por el Sindicato Obrero de la Industria del Pescado (SOIP)- ante el descontento de más de un centenar de trabajadores que se desempeñan en el procesamiento de langostino y merluza en la firma perteneciente al poderoso grupo español Iberconsa que controla prácticamente toda la cadena de producción.
Cabe recordar que el conflicto previo que se había desatado meses atrás en la empresa y que incluyó una toma de las instalaciones, tiene vinculación ya que en ese entonces ya advertían por una reducción de las tareas de quienes se encargan del procesamiento de la materia prima.
Es que los responsables de la firma habían decidido reajustar el procesamiento de la materia prima para obtener más ganancias, a costa de reducir los kilos producidos y, en consecuencia, las remuneraciones: es decir, ajustar sin contemplar el convenio colectivo de trabajo que rige la actividad. Es que el convenio colectivo de trabajo que los rige con la empresa incluye una retribución extra por las tareas de valor agregado sobre la materia prima, es decir las colas de langostino.
Ahora, el conflicto se desató porque -tras los cambios en la producción implementados meses atrás- la empresa ofrecía tareas de peonaje o envasado a quienes habitualmente se desempeñan bajo el oficio del pelador de la materia prima. “Si tenés que ser peón pero respetás el sueldo no hay problema”, explicaban desde el sindicato semanas atrás.
Entonces, la ecuación pasaba a ser: más trabajo por menos kilos de producción y, en consecuencia, menos sueldo. Incluso, complementando esa reducción de las tareas con otras como peones o envasadores, la reducción salarial al final del mes llegaba al 40%.
“Están en la producción una semana y a la siguiente están con tareas de peones y después como envasadores a valor hora”, graficaron desde el SOIP. El pedido, entonces, pasaba por al menos obtener un aumento de ese valor hora para quienes dejaban de estar en la producción, donde suelen ganar un plus en función de la cantidad producida. Sin embargo, la respuesta de la empresa fue no moverse de los valores establecidos para cada tarea.
Frente a esta disconformidad de los trabajadores, ofrecieron retiros voluntarios para hasta 12 personas que no estén de acuerdo con los cambios y garantizando solo un 70% de lo que les correspondería por una indemnización. Como contraoferta, desde el sindicato plantearon que, si van a ofrecer desvinculaciones, por lo menos que sea con la totalidad de la indemnización.
A su vez, la empresa ofreció que quienes quieran realizar las tareas de peones o envasadores se anoten para hacerlo, pero por los valores que impone la actividad: “Si no quieren no lo hacen pero solo los llamarían para pelar langostino“, indicaron. Este jueves, el resultado de la audiencia se comunicará a los trabajadores que analizarán los pasos a seguir.
