“Reparación histórica”: la UNMdP restituyó el cargo docente a “Coca” Maggi
Fue firmado por el rectorado como un “acto de justicia y reconocimiento” a la docente secuestrada y asesinada por la CNU en la previa de la dictadura.
A exactos 48 años del hallazgo de su cuerpo enterrado tras haber sido asesinada por organización de la ultraderecha peronista Concentración Nacional Universitaria (CNU) en la previa de la dictadura cívico militar, María del Carmen “Coca” Maggi recuperó, como un acto de “reparación histórica”, su cargo docente en la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP) ante la decisión de anular las resoluciones de por entonces que la declararon renunciante a sus derechos como profesora mientras se encontraba desaparecida.
La resolución fue firmada esta semana, en la previa de un nuevo aniversario del golpe de Estado del 24 de marzo de 1976 que dio paso a la sangrienta dictadura cívico militar, por parte del rector de la UNMdP, Alfredo Lazzeretti, al señalarlo como un “acto de justicia y reconocimiento” a la trayectoria académica de María del Carmen Maggi.
Concretamente, el rector dispuso anular los efectos de la resolución firmada por el entonces “decano normalizador”, Néstor Jorge Carrica, por el que afectó su derecho de continuar en el cargo docente en la Facultad de Derecho.
El texto repara en que la Resolución Nº 5/76 había establecido plazos y condiciones a los docentes de la por entonces Universidad Católica de Mar del Plata para mantener sus cargos de acuerdo con el convenio establecido con e Ministerio de Educación y Cultura de la Nación y que mediante Resolución Nº 12/76 se declaró renunciantes a sus derechos a seis docentes entre los cuales estaba Coca Maggi como titular de la cátedra Introducción a la Filosofía.
También había sido designada en distintos cargos de la Facultad de Humanidades -que hoy lleva su nombre– y de Ciencias Económicas de los que había cesado en noviembre de 1974 y marzo de 1975.
En la resolución firmada esta semana Lazzeretti señala que Maggi fue secuestrada de su casa el 9 de mayo de 1975 y destacó que al momento de dictarse su declaración de renunciante “no existía certeza alguna con respecto a su suerte” y que incluso Carrica “tenía absoluto conocimiento de la situación”.
La docente fue una de las víctimas de la CNU, el mismo grupo parapolicial de la derecha peronista que protagonizó el asesinato de Silvia Filler, los de Daniel Gasparri y Jorge Stoppani y el “5×1”, una serie de asesinatos llevados adelante el 21 de marzo de 1975.
Tras secuestrarla, entre la noche del 9 de mayo y septiembre de 1975, la llevaron a un descampado en la zona del camino viejo a Miramar donde le provocaron lesiones en la cabeza y le ocasionaron la muerte por traumatismo de cráneo. Allí enterraron su cuerpo, pero al tiempo, para asegurar su impunidad, la sacaron y la trasladaron hasta un paraje ubicado en Mar Chiquita y sus restos quedaron allí enterrados hasta el 23 de marzo de 1976, cuando fueron hallados. Con el paso de los años, algunos de los integrantes de la CNU fueron condenados en dos juicios por crímenes de lesa humanidad que contuvieron el caso de Maggi y de otras víctimas.
“A 48 años de estas acciones y si bien este acto no tiene efectos económicos, tiene sin embargo el enorme valor de reconocer por un lado la trayectoria intachable de la profesora María del Carmen Maggi y los hechos acaecidos con la importancia de asumir y enmendar errores institucionales“, argumentó Lazzeretti al momento de restituir el cargo en la resolución que fijó el cese en el cargo el 23 de marzo de 1976.
“La Universidad Nacional de Mar del Plata, en un gesto de compromiso con la verdad y la justicia, ha decidido restituir el cargo docente de la profesora Maggi, reconociendo los errores institucionales del pasado y reafirmando su compromiso con la defensa irrestricta de los derechos humanos”, expresó la institución en un comunicado.
