Repunte: “Nadie tiene la voluntad de cambiar las cosas”
Los familiares del buque hundido hace un año cuestionaron al secretario de Seguridad de la Nación, Eugenio Burzaco, por la falta de avances. Uno por uno, los pedidos incumplidos.
Pasó un año del hundimiento del buque Repunte y pasaron diez meses de un encuentro entre los familiares y el secretario de Seguridad de la Nación, Eugenio Burzaco, en el que denunciaron irregularidades y pidieron soluciones a diversos problemas advertidos tras el hecho. Sin embargo, el paso del tiempo encuentra a las familias molestas por la falta de avances en lo pedido y, en varios casos, en lo prometido por el funcionario. Por eso, al ver que las situaciones se repiten en torno al caso del buque Rigel, afirman que “nadie tiene voluntad de cambiar las cosas”.
“Hace mas de diez meses nos reunimos con Eugenio Burzaco para denunciarle las irregularidades que tuvo Prefectura Naval Argentina con el rescate en el hundimiento del Repunte y por las inspecciones que no le hicieron. También para pedirle que se conforme una comisión de investigación independiente, para que Prefectura no fuera juez y parte, porque por un lado permite salir a los barcos en cualquier condición y por otro lado investiga porqué el barco se hundió”, recordaron los familiares, pero lamentaron que ninguna de estas dos cuestiones fueran escuchadas y no registren cambios.
“No hay ningún sumario sobre las inspecciones y sobre el rescate que hizo Prefectura y lamentablemente con el Rigel vemos que nada cambió”, afirmaron al tiempo que sumaron que tampoco se ha concretado la formación de la reclamada comisión de investigación independiente. “Nos tienen en promesas de que en cualquier momento va a salir, pero el proyecto nunca está listo para ser presentado”, describieron pese a todo el trabajo y dedicación que ello le demandó a las familias.
Asimismo, también recordaron que en este tiempo tampoco fue formado un centro de asistencia a los familiares víctimas y recodaron que ello había sido prometido en un encuentro con la gobernadora María Eugenia Vidal. “Ni siquiera estando a dos metros tuvo la delicadez de hablarnos”, señalaron respecto a que a fines de la semana pasada estuvieron presentes en la apertura de la Pastoral Social, donde expuso la mandataria.
En este marco, evaluaron: “Nuestro panorama es negro y desolador porque nadie de los que tienen que tomar las decisiones tiene la voluntad de cambiar las cosas”. Entonces, lamentaron: “Ellos van a seguir calentitos en sus oficinas y nunca van a subir a un barco, por lo tanto tampoco sus familias los van a llorar como nosotros que ni el velorio pudimos hacer”. Y subrayaron: “Intentamos que algo cambie, pero nadie nos escucha”.
