Agua contaminada en Serena: piden al Municipio un análisis y garantizar la provisión
Un proyecto presentado en el Concejo Deliberante se hace eco de la problemática y de los reclamos vecinales.
Luego de conocerse los resultados de un estudio que arrojó la presencia en Playa Serena de una importante cantidad de plaguicidas en el agua subterránea del barrio y de los reclamos vecinales expuestos en las últimas semanas, un proyecto de comunicación elevado al Concejo Deliberante por la oposición pide la intervención municipal para que se garantice de la provisión de agua a través de tanques comunitarios, y que se realicen un nuevo análisis y posteriores medidas que “permitan garantizar la preservación de este insumo esencial”.
Semanas atrás se conocieron resultados de laboratorio realizados en el INTA-Balcarce en torno a una muestra del agua ante un “llamativo aumento de casos de trastornos en el neurodesarrollo” en niñeces de la zona que fueron alarmantes: hallaron nueve moléculas distintas de plaguicidas.
Mientras las y los vecinos organizados de toda esa zona del sur empezaron a reunirse para exigir soluciones, la concejala del Frente de Todos Sol De la Torre elevó en las últimas horas un proyecto al Concejo en busca de que la problemática sea abordada en el Cuerpo legislativo y que se le pidan una serie de medidas al gobierno de Guillermo Montenegro.
Concretamente, el expediente apunta a pedir que el Ejecutivo “articule los mecanismos que considere convenientes para proceder al análisis de las aguas de los barrios de la zona sur y que, en función de ello, adopte las medidas, controles y acciones que permitan garantizar la preservación de este insumo esencial para la vida, en contra de toda acción que contamine las aguas”.
También busca solicitar a Obras Sanitarias “que arbitre los medios necesarios para proveer agua potable a los y las vecinas de Playa Serena a través de los tanques comunitarios que distribuye y recarga en distintas zonas de la ciudad”.
Y, por último, pide que el gobierno informe y detalle los resultados de los controles que el Municipio debe realizar sobre las aplicaciones de agroquímicos dentro de los mil metros de proximidad a las zonas urbanizadas, específicamente en el sur de la ciudad, teniendo en cuenta la medida cautelar vigente hace años que prohíbe la fumigación a esa distancia de núcleos urbanos.
El proyecto cuestiona “el riesgo sanitario, social y ambiental que constituye la contaminación de las aguas subterráneas y la falta de regulación y control por parte del gobierno municipal frente a la aplicación de químicos para la producción convencional de alimentos” y advierte: “Frente a los resultados de las muestras de Playa Serena no sólo es necesaria y urgente la intervención municipal para la provisión de agua potable, sino que es esencial el involucramiento del Departamento Ejecutivo para profundizar y extender los análisis en los territorios en pos de adoptar las medidas y políticas que hagan falta para preservar la salud comunitaria, cuidar el ambiente y garantizar buen vivir a las comunidades”.
