De escuela a sede policial: más críticas en el Concejo contra la decisión de Montenegro
Parte de la oposición cuestionó el proyecto oficial para cambiar el destino del edificio educativo en el que se instaló la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI).
Una parte de la sesión ordinaria de este jueves del Concejo Deliberante estuvo destinada a escuchar críticas de un sector de la oposición a la iniciativa que impulsa el intendente Guillermo Montenegro para oficializar el cambio de destino del edificio que en la zona sur de Mar del Plata supo ser un Complejo Educativo Tecnológico (Cetec) y que desde fines del año pasado se convirtió una sede policial para la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI).
Al intentar sin éxito por falta de votos revertir los giros dispuestos por las autoridades del Concejo, concretamente para que el expediente pasara también por las comisiones de Educación y Seguridad, desde Acción Marplatense calificaron el cambio de destino del edificio ubicado en la avenida Jorge Newbery y N.S. de Schoenstatt como un “atropello“, solicitaron que el secretario de Educación, Sebastián Puglisi, acuda a dar explicaciones y aseguraron: “Si vamos a seguir convirtiendo lugares que fueron pensados como aulas en cuarteles o en lugares destinados a la policía nos estamos equivocando mucho”.
La situación ahora expuesta en el Concejo Deliberante, tal como informó Qué digital, se inició en noviembre cuando el gobierno municipal dispuso la instalación en Mar del Plata de la sede de la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI) de la Policía Bonaerense en donde el gobierno de Gustavo Pulti había proyectado la apertura de una Escuela de Arte y Oficios Digitales y el de Carlos Arroyo inauguró un Complejo Educativo Tecnológico (Cetec) con una oferta educativa distinta a la prevista originalmente pero que no dejaba de ser una oportunidad para la zona sur.
Ese nuevo destino del edificio fue acordado Montenegro a partir de un convenio firmado con el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, y el Concejo Deliberante no tuvo participación en ese sentido. Por eso hace unos días el gobierno municipal elevó un proyecto de ordenanza para cambiar formalmente el destino del edificio, que ya en los hechos el año pasado dejó de funcionar como establecimiento educativo al discontinuarse su funcionamiento.
Y con el ingreso del expediente al Concejo ya se inició la polémica. Es que el proyecto de ordenanza fue girado para su tratamiento a las comisiones de Obras y Legislación y tanto Acción Marplatense como el Frente de Todos y el concejal Alejandro Carrancio pidieron en la sesión de este jueves que también se sumaran las de Educación y Seguridad aunque a partir del voto “aliado” del edil Nicolás Lauría el oficialismo logró mantener lo definido originalmente.
El pedido para la incorporación de giros fue impulsado por el concejal de Acción Marplatense, Horacio Taccone, quien ya tiempo atrás cuestionó en duros términos la iniciativa oficial, e inicialmente también apuntó contra un “silencio impensado en relación a este tema”.
El concejal Taccone
“Este expediente trata de resignar un edificio destinado para formar a nuestro jóvenes y no va a pasar por la comisión de Educación, trata de que este edificio se lo vamos a quitar al sistema educativo para dárselo a una delegación de la policía y no va a pasar por la comisión de Seguridad”, enfatizó Taccone con respecto a los giros dados al expediente.
Y, sobre el cambio de destino del edificio en sí mismo, entendió que se trata de un “atropello” y pidió que como parte del paso del expediente por la comisión de Educación se citara al secretario de Educación, Sebastián Puglisi, a quien cuestionó por “hacer silencio” en el tema. También, acusó que se pretende llevar adelante un debate acotado para “que pase rápido el mal momento, que seguramente se origina en la buena relación de Montenegro con Berni y no por ninguna política de Estado”.
“Tiene que venir el secretario de Educación y decirnos a dónde van a ir los chicos y las chicas que pensamos que iban estudiar en esta escuela. ¿Para qué nos llenamos la boca hablando de distritos tecnológicos si no vamos a tener recursos humanos formados? Los distritos tecnológicos sin chicos formados elaborando software puede ser un muy bien negocio inmobiliario, pero es un muy mal negocio social”, apuntó en otro tramo de su intervención y concluyó: “Si vamos a seguir convirtiendo lugares que fueron pensados como aulas en cuarteles o en lugares destinados a la policía nos estamos equivocando mucho”.
Los concejales Lauría y Carrancio
A su turno, el concejal de Crear Juntos Alejandro Carrancio se sumó a las críticas: “El mejor edificio educativo que tenía la ciudad se está buscando transformarlo en una comisaría“, apuntó y coincidió con el pedido de sumar los giros a las comisiones de Educación y Seguridad aunque luego fue su propio compañero de bloque, Nicolás Lauría, quien sumó su voto a los del oficialismo para impedir ese objetivo.
