El Centenario, en crisis habitacional: conformaron una mesa de trabajo
Tras una serie de asambleas, la Defensoría del Pueblo junto a más de cien vecinos consolidan la conformación de un espacio para exigir al Estado soluciones concretas a la problemática.
En medio de la crítica situación habitacional que vive el barrio Centenario sin soluciones concretas por parte del estado municipal, provincial y nacional, la Defensoría del Pueblo de General Pueyrredon junto a vecinos y organizaciones que participan en el barrio de espacios asamblearios decidieron conformar una mesa de trabajo denominada “Arreglen el Centenario”. El objetivo, describieron, es seguir presionando para “lograr la reparación histórica que los vecinos demandan”.
La Defensoría del Pueblo junto a 130 vecinos del barrio Centenario y organizaciones conformaron, luego de distintas asambleas vecinales en las que analizaron la “difícil” situación edilicia que atraviesa el complejo habitacional tras el desprendimiento de escaleras, rotura de caños y de cloacas -entre otros problemas de infraestructura-, la mesa de trabajo “Arreglen el Centenario”.
Las asambleas, realizadas en la Escuela Primaria N°4, se dieron luego de haber elevado petitorios al Instituto de la Vivienda y al Ministerio de Hábitat de la Provincia de Buenos Aires en busca de soluciones y tras haber participado en las comisiones de Obras y Legislación del Concejo Deliberante, según explicaron.
Fue justamente en la comisión de Legislación donde sectores del oficialismo y el gobierno municipal rechazaron en las últimas semanas la propuesta de destinar para obras en el Centenario las “compensaciones urbanísticas” que generarán cuatro iniciativas privadas que buscan construir torres por fuera de lo normado en el Código de Ordenamiento Territorial: es que, desde el oficialismo, afirman que se trata de una problemática de índole privada y, ante la falta de escrituras, de jurisdicción provincial.
Bajo ese contexto, desde la Defensoría del Pueblo plantearon que la mesa de trabajo se centrará en la continuidad de los reclamos planteados al estado municipal, provincial y nacional en torno a soluciones que permitan abordar la problemática estructural y de infraestructura que consideran urgente y por la que 22 mil vecinos y vecinas se encuentran en emergencia habitacional.
“El riesgo ya concretado de derrumbes, pérdidas de agua y cloacas, falta de iluminación y de todo mantenimiento ameritan la urgencia de quienes tienen responsabilidades políticas para brindar soluciones antes de que se deba lamentar desgracias personales”, advirtieron.
En junio, desde la administración del Centenario señalaban que “el complejo depende hoy del complejo mismo” luego de que se desprendieran tres escalares, con el riesgo que ello implica, y ante la falta de respuestas del Estado para concretar un final de obra de las instalaciones construidas como viviendas sociales entre 1978 y 1982.
“El Centenario fue construido con enormes deficiencias de origen por autoridades del gobierno dictatorial. Existe una responsabilidad indiscutible del Estado. Vive allí el 3,65% de la población del Partido de General Pueyrredon, es una ciudad dentro de otra ciudad”, reiteraron desde la Defensoría en las últimas horas a través de un comunicado.
La mesa de trabajo “Arreglen el Centenario”, según detallaron en una primera instancia, tendrá como presidente al arquitecto Héctor De Schant y acompañará distintos ejes de trabajo como el planteado semanas atrás por el Colegio de Arquitectos, desde donde se planea realizar un informe técnico de las instalaciones que “permita justipreciar las necesidades de una eficiente intervención”.
A su vez, desde la Defensoría remarcaron, a pesar del rechazo del gobierno municipal, que la mesa coincidió en la oportunidad de destinar parte de las compensaciones urbanísticas actuales y también futuras para la reparación del “castigado” Complejo Centenario. En ese marco, prevén realizar un acto recordatorio por el 42° aniversario del comienzo de obras el próximo 13 de septiembre.
El complejo habitacional Centenario de Mar del Plata fue construido en terrenos del viejo Matadero Municipal con financiamiento del Fondo Nacional de Vivienda (Fonavi) -aunque también con recursos provinciales del Fondo Provincial de la Vivienda (Foprovi) y municipales- entre 1978 y 1982. Originalmente, el sector contaba con 1.600 viviendas pero desde entonces pasaron a habitarlo miles de personas a pesar de no contar con el final de obra.
A lo largo de los años, esa creciente densidad poblacional llevó a que el Estado de alguna manera se involucrara más allá de las condiciones habitacionales sin atender y construyera establecimientos educativos, un polideportivo y un centro de salud en las inmediaciones.
Sin embargo, a las particularidades del complejo que incluyen, por ejemplo, un funcionamiento a base de administraciones y consorcios (a pesar de ser viviendas sociales), la falta del reclamado “final de obra” o las ocupaciones de viviendas, se suman las responsabilidades compartidas entre los distintos niveles del Estado y las dificultades en el mantenimiento de las instalaciones por parte de las administraciones vecinales. Mientras tanto, las problemáticas habitacionales más importantes del lugar siguen sin tener una solución de fondo.
