Domingo 12 de mayo | Mar del Plata
07/03/2023

Ser mujer y taxista en un sector masculinizado

8M | Mujeres Trabajadoras

Ser mujer y taxista en un sector masculinizado
(Fotos: Qué digital)
Celeste Verdicchio

Por: Celeste Verdicchio

Pasan los años y los sesgos de género que discriminan socialmente entre qué lugares son ocupados por hombres y cuáles por mujeres, continúan presentes en el mercado de trabajo. Según datos del Indec, las mujeres y feminidades continúan ocupando puestos laborales asociados al cuidado, las tareas domésticas, la enseñanza y la salud. Por el contrario, se evidencian sectores masculinizados como la industria manufacturera, la construcción o el transporte en los que el acceso de mujeres es prácticamente nulo o limitado por razones culturales.

Hace casi 16 años que Sandra es taxista en Mar del Plata. Es decir, se desenvuelve a diario en un trabajo mayoritariamente ocupado por choferes hombres. En el marco del 8 de marzo, Día de la Mujer, relata en una entrevista con Qué digital su experiencia personal en estos años de trabajo, cómo llegó a manejar el negrito y qué implica ser una “mujer al volante”.

Nunca pensé que me iba a subir a un taxi, pero se dio la oportunidad y bienvenida”, cuenta Sandra al recordar cómo fue que llegó a su primer taxi 16 años atrás. En aquel momento —año 2007—, el por entonces dueño de la licencia le ofreció el taxi a su pareja pero a él no le interesó y fue ahí donde Sandra, en aquel momento sin trabajo, tomó la oportunidad.

Los primeros años, cuenta, trabajó como chofer para el dueño de la licencia. Tres años después, logró transferirla y ser dueña de su primer taxi: un Renault 9. De ese momento pasó por varios modelos hasta llegar al negrito, un Fiat Siena, con el que comienza su jornada laboral a las 7 de la mañana, toma un primer viaje desde la aplicación de la empresa de taxis y luego continúa a lo largo de la mañana y tarde “manejando sus propios horarios” desde la parada más cercana.

“Fue un poco difícil al comienzo”, reconoce en torno a los prejuicios de ser mujer y taxista. A sus 52 años y luego de varios años de experiencia, admite que hoy esos prejuicios “son menores” aunque todavía, en ciertos casos, “llama la atención” ver a una chofer.

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“Me pasó una vez que se subió un varón en el auto, tiró el bolso y dijo ‘ah, mujer tenías que ser’. Esperé, le consulté a dónde lo llevaba y le pregunté qué problema tenía con las mujeres si él había nacido de una. Listo, se terminó la charla”, recuerda como parte de las experiencias laborales que grafican situaciones machistas y violentas por motivos de género.

Sobre esos prejuicios sociales y culturales, también aparece con frecuencia sostiene Sandrala idea de matrimonio y no, por el contrario, el ideal de una mujer autónoma y sin pareja: “Te ven nueva y están acostumbrados a que si está la señora, entonces hay un señor y el matrimonio”.

De las 2.147 licencias habilitadas de taxis en la ciudad, en un rubro históricamente masculinizado, solo entre 50 y 60 choferes de taxi son mujeres en Mar del Plata de las cuales alrededor de 15 son de Servitaxi, la empresa para la que trabaja Sandra.

LO FEMENINO, REPRESENTACIÓN DE LA SEGURIDAD Y EL CUIDADO

Ante denuncias por situaciones de acoso por parte de conductores varones y con el objetivo de dar mayor seguridad a las mujeres y feminidades que deciden tomarse un taxi o un remis, en 2021 el radicalismo presentó un proyecto de ordenanza para que se incorpore en Mar del Plata la posibilidad de elegir choferes mujeres al momento de solicitar el servicio.

La normativa finalmente se aprobó en diciembre de 2022 y desde entonces el gobierno municipal quedó en condiciones de establecer convenios con las empresas para que cualquier usuaria solicite —telefónicamente o a través de la aplicación— a una conductora mujer. Para Sandra, esa “diferencia” a la hora de viajar con una mujer en vez de con un hombre se ve reflejada en el día a día con las usuarias que, considera, viajan más tranquilas.

“Incluso cuando te paran, a veces se ponen contentas. Ven a una mujer al volante y da seguridad. Es que cometemos menos infracciones, tratamos de andar un poco más tranquilas y cumpliendo las normas. También tenemos un poco más de precaución”, relata Sandra al respecto y asegura que desde la empresa para la que trabaja cuentan con la opción de verificar a través del WhatsApp los datos de las y los choferes y que ante cualquier problema a diferencia de las aplicaciones de transporte que funcionan sin habilitación y se mantienen en el foco de conflicto en la ciudad— la persona usuaria puede dirigirse a la empresa o a la dependencia municipal de Transporte para denunciar la situación.

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“Dicen que hay que aggiornarse a las aplicaciones pero somos nosotros los que tenemos radiollamada, WhatsApp y apps que dicen quién es el chofer. Con la aplicación (Cabify, Uber) se están subiendo con personas desconocidas y si atraviesan alguna situación no se pueden defender porque ¿a dónde van? ¿a la aplicación?”, grafica Sandra al considerar también como ventaja el requisito municipal del botón de alerta del sistema de posicionamiento global (GPS) en los taxis y acusar que Guillermo Montenegro “incumple” con la ordenanza vigente que prohíbe a las aplicaciones.

ABRIRSE CAMINO EN UN SECTOR MASCULINIZADO

Cada #8M se transforma en una jornada en la que miles de mujeres, feminidades y disidencias salen a las calles a hacer escuchar su voz con consignas que van desde la violencia de género, los femicidios hasta la brecha salarial, para exigir aquellos derechos que no se cumplen, los que aún faltan conquistar y políticas estatales que garanticen la igualdad de género.

Según datos del Indec, como parte de las brechas estructurales de género, en Argentina las mujeres trabajadoras continúan ganando menos que los varones por realizar las mismas tareas. A pesar de tener niveles de formación más altos en la educación formal, las mujeres tienen menos posibilidades de ingreso al mercado laboral y, cuando acceden, tienen más posibilidad de sufrir mayor carga horaria.

Además, continúan subrepresentadas en el mercado de trabajo: pese a tener mayor formación y en distintas profesiones, las estadísticas muestran que ocupan más cargos vinculados al cuidado —en muchos casos no remunerados, por ejemplo a través del cuidado de niñeces o adultos mayores además de tener otro trabajo, algo que deriva en una sobrecarga laboral y tienen menos posibilidades de acceder a puestos jerárquicos de poder y de toma de decisiones (conocido como el concepto-metáfora de techo de cristal en referencia a esas barreras “invisibles” pero reales que imposibilitan el ascenso en los puestos).

En consecuencia, las estadísticas del Instituto reflejan esas situaciones de sobrecarga y de brecha de género en el acceso y permanencia laboral hasta la última instancia. Es que, al momento de retirarse del mercado de trabajo, las mujeres en edad jubilatoria cuentan con menos aportes en comparación a los varones y, por ende, deben recurrir a una moratoria para lograr jubilarse y percibir, también en comparación a los hombres, haberes jubilatorios más bajos.

La idea de cuidado y seguridad asociado a lo femenino continúa presente en el cotidiano y también en la mano de obra. En sectores laborales donde el acceso es prácticamente limitado, como en el caso de los taxis, en el ejercicio profesional —en condiciones, a veces más sutiles y otras más marcadas, de desventaja frente a sus compañeros varones— las mujeres y feminidades se destacan en su trabajo por cómo lo realizan. 

Sandra cierra su relato y cuenta que en los taxis son muchas las “mujeres trabajadoras de muchas horas”. Es que, por lo general, los patrones les dan el auto todo el día porque “confían mucho en ellas, muchas veces un poco más que en los hombres”. Las mujeres —afirma con precisión— cuidan mucho más el auto, le realizan los mantenimientos que necesitan mientras que algunos varones “lo cuidan hasta por ahí nomás”. Además de ser compañeras de trabajo, Sandra asegura que con muchas de ellas, en el paso de estos años, se ha forjado una amistad e incluso han compartido el Día de la Mujer además de estar juntas “cuando se tuvo que hacer alguna movilización”. 

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07/03/2023