La pareja acusada de violar y matar a su beba se negó a declarar
Lucía Sosa y Javier Picart, detenidos el lunes a la noche, guardaron silencio ante la fiscal María Isabel Sánchez. Su abogada defensora es la misma que la de Offidani, Farias y Maciel, por el crimen de Lucía.
Horas después de haber sido detenidos, Lucía Sosa y Javier Picart se negaron a declarar este martes ante la fiscal María Isabel Sánchez en el marco de la causa en la que están acusados por el abuso sexual y homicidio de su beba de 11 meses.
Los padres de la beba que falleció el lunes pasado en el Hospital Materno Infantil fueron detenidos este lunes cerca de las 22 en Rawson y 228, a partir de un operativo del que participó personal de la Comisaría de la Mujer, aunque las tareas para dar con la pareja fueron coordinadas por la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI).
Este martes debían prestar declaración ante la fiscal del caso, pero optaron por guardar silencio y no aportar datos acerca del contexto en el que se produjo el abuso sexual y el ingreso al hospital seguido de muerte de su beba de 11 meses.
Picart permanece alojado en la Unidad Penal Nº44 de Batán, mientras que su pareja -que se encuentra embarazada- continúa en la Unidad Nº 50 del mismo complejo. La defensora oficial de ambos es la abogada Laura Solari, quien también representa legalmente a los tres detenidos por el crimen de Lucía Pérez, Juan Pablo Offidani, Matías Farías y Alejandro Maciel.
Sosa y Picart están imputados por “abuso sexual seguido de muerte”. En cuanto a su detención, la misma se produjo tras la intervención de una falsa asistente social, a quien la pareja le confesó estar muy asustada y así fue cómo los efectivos policiales dieron con su paradero y lograron aprehender al hombre y a la mujer.
Lucía Sosa, quien se encuentra nuevamente embarazada, y Javier Picart habían desaparecido el viernes de su casa, poco después de que trascendiera que la fiscalía había decidido investigar a la pareja, luego de que la autopsia confirmara el abuso sexual de la menor.
Lucía Sosa y Javier Picart no son ajenos a los medios. Su historia trascendió a fines de 2014 cuando comenzaron a reclamar la custodia de tres de sus hijos, tras la muerte de una bebé de alrededor de seis meses en 2013 en circunstancias poco claras. En ese entonces, la pareja tuvo el acompañamiento de la ONG En Red, que había realizado una campaña para reclamar que la Justicia de Familia volviera a poner a los niños al resguardo de sus padres.
En una entrevista con QUÉ, la pareja había denunciado “violencia y discriminación institucional”, dado que al momento de la muerte de la bebé los médicos aseguraron haber encontrado cocaína en la sangre de la pequeña, pero en cuatro autopsias no fueron hallados los rastros de esa sustancia.
