Contaminación pesquera: buscan reducir el abandono de redes y establecer multas
Así se desprende de un proyecto de ley de “Gestión ambiental de residuos de artes de pesca” presentado en la Cámara de Diputados
Diputados nacionales presentaron un proyecto para generar en la industria pesquera una “Ley de Gestión ambiental de residuos de artes de pesca” a través de la cual buscan reducir al mínimo posible la contaminación del sector y establecer multas de hasta mil sueldos básicos a las empresas productoras de estos insumos. El impacto en el ecosistema y en especies comerciales, entre los argumentos.
El proyecto, ingresado al Congreso de la Nación, busca la implementación del principio de responsabilidad extendida hacia el productor de redes, aparejos y líneas de pesca, particularmente al momento de garantizar una gestión diferenciada de los residuos que, en caso de ser abandonados o manejados de manera inadecuada, pudieran generar consecuencias ambientales.
Más allá de las prácticas pesqueras en altamar, el proyecto hace foco particularmente en quienes producen las artes de pesca. Al respecto, se espera que la autoridad de aplicación -la que defina cada provincia- le imponga la creación y el cumplimiento de un sistema de gestión de residuos, es decir, un conjunto de normas y procedimientos basados en lineamientos específicos para el manejo de los restos que ya cumplieron su vida útil.
En uno de los artículos, el proyecto de ley establece entre sus objetivos “minimizar hasta reducir a cero el abandono y/o disposición final de artes de pesca, ya sea en el ecosistema marino y/o costero como en los vertederos de residuos, aplicando los conocimientos y mejores técnicas disponibles para su reutilización, tratamiento y reciclado”.
También, apunta a que la vigencia de la ley impulse la utilización de materiales de mayor durabilidad o bien artículos biodegradables y disminuir el daño causado a las especies marinas, entre otros.
En cuanto a las sanciones a productores de artes de pesca por mala gestión de los residuos, se establece un régimen que, tras un apercibimiento, consta de una multa entre 1 y 1.000 sueldos básicos de la categoría inicial de la Administración Pública Nacional, dinero que se espera sea afectado “al área de protección ambiental que corresponda“.
“Se estima que cada año se pierden o abandonan 640.000 toneladas de artes de pesca en los océanos. Una décima parte de todos los desechos en los océanos se componen de aparejos abandonados”, argumentan los autores del proyecto, Mariana Zuvic y Maximiliano Ferraro, de la Coalición Cívica, a la vez que resaltan que, una vez descartados, se trata de residuos que “continúan causando estragos en la vida acuática, matando animales de todo tipo, y causándoles sufrimiento durante extensos períodos”.
Asimismo, consideraron que como parte de la erosión de las artes de pesca abandonadas se generan compuestos químicos que “ingresan en la cadena alimentaria marina y pueden acabar en los tejidos de especies de consumo humano, con consecuencias sobre la salud de las personas”.
Cabe mencionar que a fines de 2022 se realizó por parte de la Fundación Vida Silvestre un “Censo Provincial de Basura Costera”, del cual se desprende que más del 70% de los residuos que llegaron a las playas bonaerenses eran plásticos y provenientes no solo de sistemas de drenaje urbanos, sino también de lo que diariamente arrojan las personas en ambientes costeros o en las descargas desde embarcaciones.
De todos modos, según ese censo, es en la costa patagónica donde los residuos de la industria pesquera prevalecen sobre los urbanos.
Por su parte, un estudio reciente dado a conocer por el Conicet y la Universidad Nacional de Mar del Plata en torno a los cuerpos de cetáceos encontrados en playas o capturados de manera accidental, detectó la ingesta de residuos de origen marino y otros elementos procedentes de la navegación comercial o deportiva en el 8,3% de los ejemplares estudiados.
