“La mano dura y la violencia no disminuyen la inseguridad”
Lo aseguraron los organizadores del Festival y Marcha de la Gorra, que tuvo lugar en Plaza Rocha. Distintas organizaciones se convocaron en defensa de los derechos civiles y contra la estigmatización.
“No soy delincuente por ser humilde”. “Mi visera no es delito”. “No soy portador de rostro sino de identidad”. Esas fueron algunas de las consignas presentes en el Festival y Marcha de la Gorra, actividad que se desarrolló este sábado en la Plaza Rocha y que congregó a distintas organizaciones sociales, quienes se convocaron en defensa de los derechos civiles y contra la estigmatización y los casos de gatillo fácil.
Pese a que hace algunas semanas se realizó una actividad similar -aunque con menos convocatoria-los organizadores aseguraron que la “interna política” fue el factor por el cual la convocatoria se fragmentó. La Marcha de la Gorra de este sábado incluyó música, murgas e intervenciones artísticas y sociales, de la mano del testimonio de jóvenes e integrantes de agrupaciones que realizan actividades inclusivas en la cárcel de Batán.
En concreto, y según lo que explicaron, el objetivo de la actividad fue “difundir los derechos de la juventud y empezar a crear consenso de que la mano dura y la violencia no disminuyen la seguridad”. “Es con más derechos, con más inclusión y escuchando a los chicos que se logra una seguridad democrática”, sostuvo Eugenia Tommasi, integrante de Patria Grande, una de las agrupaciones convocantes.
En ese sentido, Tommasi cuestionó el hecho de que exista “violencia institucional y maltrato policial”, algo que “se sufre en especial en los barrios más vulnerables, aunque también sucede con los chicos en estado de calle, que están solos en el centro, y a quienes el Estado no se les acerca para acompañarlos sino para maltratarlos”.
En relación al cambio de gobierno y la asunción, en la ciudad, de Carlos Arroyo como intendente, desde Patria Grande advirtieron que serán tiempos en los que la organización será clave. “Vamos a marcar que no estamos dispuestos a ceder en nuestros derechos, que queremos construir seguridad democrática, porque es cierto que en los barrios se padece a la policía, pero también se la necesita”, apuntaron.
Al respecto, la dirigente de la agrupación adelantó que en los próximos días le presentarán al intendente un pliego con reivindicaciones que, entre otros puntos, incluirá el pedido para que se cree el órgano de control externo de la Policía local, además de la conformación de un Consejo contra la Violencia Institucional, integrado por distintas organizaciones civiles y sociales.
EL ROL DE LA SOCIEDAD
“Queremos dejar en claro que hay un piso de derechos conquistados y que no vamos a permitir que se retroceda en ese sentido”, consideró, al tiempo que se refirió, también, a la situación que atraviesan las familias que sufren casos de gatillo fácil, de estigmatización o persecución policial. “Cuando a una familia le matan a un pibe, le matan a un hijo, después se habla de gatillo fácil; esos procesos los acompañamos, con cuidado y respeto, porque no tienen que ver con una visión política, sino con el dolor de la pérdida”, apuntó.
En esa misma línea, y consultada respecto a la postura que ha asumido la sociedad en este tipo de situaciones, para Tommasi “se ha generado un avance”, pero todavía falta. “Nosotros no decimos ‘no a la policía’, sino que lo que pensamos es que la institución debe respetar los derechos; los efectivos no pueden creer que pueden amenazar a cualquier pibe, ellos pueden detener o aprehender a alguien, pero sin golpearlo y sin pasarse de sus facultades. La realidad es que cuando los pibes tienen gorra, son morochos o humildes, esos derechos están más vulnerables”, reflexionó.
