Reclaman a Montenegro que se regularicen las frecuencias de las líneas 511 y 501
Lo plantearon desde el Concejo Deliberante ante reclamos reiterados en la zona sur. También exigen que se difundan las frecuencias.
Pese a que hace años los colectivos que particularmente circulan hacia la zona sur de Mar del Plata funcionan con frecuencias limitadas y con un exceso de capacidad exponencial, las soluciones nunca llegan. Y a partir de nuevos reclamos surgidos desde ese sector de la ciudad desde el bloque de Acción Marplatense presentaron un proyecto de comunicación para pedirle al intendente Guillermo Montenegro que regularice las frecuencias y que, además, intime a las empresas que monopoliza Juan Inza a difundir y publicar cada una de las frecuencias de todas las líneas.
Después de la prórroga de dos años de los contratos formalizada por el intendente antes de terminar el 2023, los colectivos en verano ven agravado su deficiente servicio ante una mayor demanda, y así a partir de recurrentes reclamos llegados desde vecinos y vecinas de la zona sur la concejala de Acción Marplatense Eva Ayala presentó un proyecto de comunicación en el que expone la realidad de las líneas 511 y 501 y pide algún tipo de solución.
Para eso, busca que desde el Concejo se solicite al Ejecutivo que “active las medidas necesarias a fin de regularizar o cumplimentar con la frecuencia establecida en el contrato recientemente prorrogado para la línea 501 y los distintos ramales de la línea 511″. Y que “intime a las empresas prestatarias del servicio a dar cumplimiento con la difusión y publicación de las frecuencias y recorridos de las líneas”, tal como lo exige el contrato que sigue vigente con repetidas prórrogas.
El expediente, ante el crítico servicio, fue ingresado apenas días después de que los empresarios encabezados por Inza pidieran un descomunal aumento del boleto del 187% para llevar la tarifa plana de los actuales $297,32 a $854,46.
“No obstante lo dispuesto en las ordenanzas, ninguna de las frecuencias allí determinadas como de mínimo cumplimiento para las prestatarias son respetadas”, cuestiona el proyecto ingresado el Concejo y vuelve a apuntar contra el “nulo control de parte del Ejecutivo municipal” y la “nula la información brindada a los usuarios que deben esperar en algunos casos más de una hora para poder llegar a sus hogares, trabajos, o lugar de esparcimiento en el mejor de los casos, cuando no es una emergencia la que motiva la necesidad de trasladarse en colectivo”.
El expediente repara en las situaciones “que padecen” vecinos y vecinas de la zona sur o quienes se dirigen hacia ese sector de la ciudad “utilizando, o pretendiendo utilizar, las líneas 501 o 511 en sus diferentes ramales y deben esperar durante una hora, a la vera de la ruta y en muchos casos sin refugio, la llegada del colectivo y encontrándose con la sorpresa de que el mismo no para por estar colmada y excedida su ocupación, generando mayores demoras y malestar, sin importar si es de día o de noche, si hace calor, frío o si llueve”.
Y también menciona que en el caso de los servicios del 511 que llegan hasta el arroyo Las Brusquitas, en el extremo sur es la única alternativa para las y los vecinos ya que si no deben utilizar el servicio de media distancia de Costa Azul con tarifas muy superiores, actualmente en torno a $1.500 después de aumentos aplicados de manera ilegal, según reconoció el propio gobierno provincial, con jurisdicción en esos servicios que además no cuentan con el sistema SUBE.
En torno al sistema de colectivos municipal, en diciembre el intendente Guillermo Montenegro prorrogó por otros dos años las concesiones teniendo en cuenta que el propio oficialismo a lo largo de todo el año pasado no impulsó el tratamiento del nuevo pliego licitatorio en el Concejo Deliberante, que ahora volverá a ser revisado y modificado por el Ejecutivo.
Además, pidió al Concejo que extienda por un año más el estado de emergencia en el que se declaró al servicio después de la pandemia del coronavirus al argumentar que el sistema no volvió a recuperar el total de personas usuarias -motivo por el cual se redujeron frecuencias que nunca se recuperaron- y también sumó como causas la “caída de subsidios” y la “alta inflación”.
