Paro docente: “Al gobierno no le interesan las áreas sensibles”
Con un 90% de adhesión, los docentes de Udocba concretaron una medida de fuerza en reclamo de un aumento salarial. “La gobernadora dijo que los docentes no podían cobrar sueldos miserables y ahora estamos peor”, advirtieron.
En el marco del paro a convocado por la Unión Docentes de la provincia de Buenos Aires (Udocba)- medida que en la ciudad cuenta con un 90% de adhesión-, desde la conducción del gremio se refirieron a la situación que atraviesa la educación y manifestaron su preocupación ante las políticas públicas de la gestión de María Eugenia Vidal. “Al gobierno no le interesan las áreas sensibles”, señalaron y pidieron un aumento salarial acorde a la realidad que vive el país.
En diálogo con QUÉ, en la radio, el secretario general de Udocba Mar del Plata, Gabriel Di Nanno, destacó lo masivo de la medida de fuerza, convocada “frente a los aumentos de precios de marzo y abril y lo atrasado de los salarios”. “Exigimos una reapertura paritaria, esto no es un capricho, es una necesidad de los docentes que no están de acuerdo con lo que están ganando”, advirtió.
En ese sentido, el dirigente gremial graficó la situación al afirmar que “el sueldo de una maestra es de $8850 y para no ser pobres hacen falta $11.800”. “Nadie trabaja para ser pobre, pero la realidad es que hay problemas no solo con los docentes sino también con los trabajadores judiciales, estatales, de la salud. Pareciera que al gobierno no le interesan las áreas sensibles”, consideró.
Respecto al reclamo que motivó la medida de fuerza, Di Nanno recordó que Udocba fue el único gremio que rechazó la propuesta salarial del gobierno de Vidal y que lo que buscan es la reapertura de la paritaria para volver a discutir el salario. “En campaña la gobernadora dijo que los docentes no podían cobrar los sueldos miserables que cobraban, pero la verdad es que ahora estamos peor que antes”, subrayó.
Justamente en esa misma línea, el representante local del gremio cuestionó el cobro en negro y los aumentos en los impuestos y servicios básicos. “En paralelo, seguimos con los mismos problemas de infraestructura, de transporte, en los comedores escolares”, criticó y habló del impacto de esta situación en el bolsillo del trabajador.
“Cuando vamos al supermercado vemos que los precios siguen subiendo y por eso existe esta gran preocupación. Ellos dicen que no hay plata, pero nosotros creemos que eso se puede resolver”, observó, antes de completar: “De la misma manera que se sacaron los subsidios al gas, al agua y, a la luz, hay que sacar los subsidios a las escuelas privadas, porque no se puede subvencionar a una escuela toda la vida; nuestras escuelas públicas se caen a pedazos y vemos que la plata va para las escuelas privadas”.
