“El HIGA no puede esperar más”: estado de alerta de trabajadores y abrazo solidario
Desde el gremio Cicop reclaman soluciones a la grave crisis que atraviesa el hospital, que está hace cuatro semanas sin gas. Convocaron a una concentración.
Mientras el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA) de Mar del Plata se mantiene sin gas hace cuatro semanas en un marco de numerosas problemáticas que se suceden en el tiempo, las y los profesionales de la salud nucleados en el gremio Cicop se declararon en estado de alerta y movilización para reclamar a las autoridades sanitarias respuestas y soluciones y convocaron a un “abrazo solidario” para el próximo miércoles bajo la consigna “El hospital Alende no puede esperar más”.
La situación de crisis que atraviesa el HIGA está lejos de ser nueva y se arrastra con el correr de los años, pero el corte de gas que ya lleva cuatro semanas a partir de falencias en las instalaciones volvió a potenciar los reclamos de pacientes y de las y los trabajadores que día a día se desempeñan en el hospital que contiene la demanda de Mar del Plata y de 16 distritos de la región.
En ese contexto, desde la comisión directiva de la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la Provincia de Buenos Aires (Cicop) Hospital Alende de Mar de Plata emitieron un comunicado en el que informaron su declaración en estado de alerta y movilización y convocaron a la comunidad hospitalaria y a la ciudadanía a un “abrazo solidario” para el próximo miércoles 7 de diciembre a las 10:30.
Desde Cicop graficaron en el comunicado que el corte de gas “viene a complejizar el estado de precariedad en el que se encuentra la institución“.
Es que enumeraron -en sintonía con diversos reclamos expuestos en los últimos meses y repetidos desde hace años- que “al deterioro edilicio se suma el tecnológico con fallas constantes de aparatología, que no alcanza para acceder a definir diagnósticos de patologías críticas que inciden en la estadía prolongada de las personas durante la internación”.
De la misma manera, apuntaron a la “falta de insumos importantes” para la continuidad de tratamientos o “averías” en los ascensores que limitan el traslado de pacientes y profesionales incluso dentro el hospital. Es en ese contexto que se suma la situación en torno al gas, que además del reclamo sindical, trajo diversos planteos desde la política, incluso con un pedido de citación a las autoridades sanitarias al Concejo Deliberante.
“La carencia o escasa respuesta a estas circunstancias culminan en maltrato hacia las personas que asistimos y hacia nosotros. Padecemos un largo proceso de desgaste, de cansancio y frustración que produjeron renuncias significativas de jóvenes profesionales, con alta probabilidad de que servicios queden sin posibilidad alguna de ofrecer formación y prácticas significativas de atención por no contar con recurso humano suficiente”, mencionaron desde el gremio como parte de las consecuencias.
Esta situación -que no es nueva- afirman que intentaron “problematizarla” con los distintos actores intervinientes pero lamentan que, a poco del inicio de la temporada estival que multiplica la demanda de atención el panorama está “en un camino difícil”, admiten al reconocer que ya no es posible brindar la atención “deseada” y “competente” como institución de salud.
Por último, exigieron a través del comunicado y como previa al abrazo simbólico: “Solicitamos a las autoridades que asuman en cada nivel de atención la función que les corresponde y en nuestra institución requerimos la reapertura a la brevedad del Comité Asesor Técnico Administrativo y que este asuma el rol del Comité de Crisis porque ¡el Hospital Alende no puede esperar más!”.
